Hoy en el cargo de Controlador, haber ganado una bicicleta ha sido una bendición, pues vive en el barrio Olaya, a 20km y por lo menos hora y cuarto en tiempo desde su casa hasta el Club. Su medio de transporte había sido hasta el momento Transmilenio y el SITP, lo cual se volvía complicado por los horarios de entrada temprano en la mañana y salidas en la noche. Adicionalmente, Daniel tiene tres hijos que viven actualmente con su mamá. La bicicleta le va a permitir visitarlos con más frecuencia. “Cuando salí como beneficiario del programa, tuve que hacer un curso de movilidad con Sura, y quince días después me entregaron la bicicleta”, cuenta Daniel. El haber salido favorecido con el programa “Movilízate en bici” le ayudará no solo a reducir tiempos de desplazamiento, sino en temas de salud. “Yo estoy un poco por encima de mi peso, con lo cual la bicicleta me va a ayudar con el ejercicio y a acondicionar mi cuerpo. Me toca ir poco a poco hasta adquirir un buen ritmo”, comenta Daniel.